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Cuántos pensábamos que la película de Indy y la nueva Misión Imposible iban a arrasar mientras se pronosticaba la ostia de Nolan en una película que parece imposible atraer al gran público.
Pero estamos en los tiempos en los que estamos y una genial campaña viral basada en un meme que juntaba las dos películas ha conseguido lo impensable: que muchísima gente acuda vestida de rosa para ver la enésima adaptación a imagen real de un juguete (en este caso muñeca) y que todavía exista un gran porcentaje de espectadores interesados en un cine adulto acudiendo al cebo de un director de prestigio.
Maravilloso, no todo está perdido…