Megalopolis

[manuwar]

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Por dónde empezar.......digamos que 'Megalopolis' es una película que nace tras una gestación de más de 40 años. La idea nació en 1977. En 1983 se empezó a desarrollar activamente. Los preparativos para la filmación se concretaron en 1989 para filmarse en Roma, pero se pospusieron después de que Coppola priorizara otros proyectos para pagar su deuda con Hollywood después de una serie de fracasos de taquilla (y ni tan mal, así tuvimos 'Dracula').
El proyecto se reactivó en 2001, pero fue abandonado tras los atentados del 11-S. Tiempos demasiados sensibles para una película que trata sobre la destrucción y construcción de edificios.
Coppola, ya decidido a autofinanciar la película vendiendo parte de su bodega en California, retomó el proyecto en 2019, y tras sobrevivir a la COVID, que bien pudo haber dado al traste con ello nuevamente, aquí estamos, en 2024, con la película en los cines. Y de puro milagro, porque con 'Megalopolis' aún en la lata (digital), Coppola tuvo serias dificultades para encontrar distribuidora que se atreveviera a disponer la película en salas. Al final picó Lionsgate, y deben estar maldiciendo el día en que se gastaron un solo céntimo en ella.

¿Tan mala es? Bueno no, bueno sí, lo que es, es invendible. Una película de PUTO AUTOR, experimental, no de arte y ensayo pero casi, con una trama difícil de seguir, sin ningún tipo de sentido del ritmo y con diálogos que en más de un 80% están elaborados a partir de frases filosóficas.
Películas así hay muchas. Pero no cuestan 120 millones, sino dos, y no se estrenan en casi 2000 salas, sino en cinco.

Coppola ha firmado una película libre como el viento, inclasificable, vanguardista, extremadamente pretenciosa e insoportablemente pedante. La obra de un artista pagadísimo de sí mismo, seguro de estar haciendo su obra maestra, LA OBRA MAESTRA y una película solo para aquellos que la sepan apreciar, sabedor de su singularidad.

Solo que muy pocos la van a saber apreciar. Porque es confusa, es aburrida no, aburridísima, la trama es naif en su pretensión de funcionar como "fábula" (así se define la propia película), y la gran parte de los actores están desastrosos, recitando líneas de diálogos bochornosas a las que cuesta seguir el hilo. No porque yo sea tonto y no las entienda, sino porque salen de la boca de sus intérpretes sin ton ni son. ¿Os acordáis de la célebre línea de 'The Room', "anyway, how is your sex life?" Pues así.
Es tan, pero tan pretenciosa en su intención de metaforizar la antigua Roma en la norteamerica actual, con nombres como César Catalina, Alcalde Cicero, Craso, Claudio.....la única excepción es el personaje de Aubrey Plaza, que tras una sesión de 24 horas de Francis viendo el canal Nickelodeon, ha dado en llamarse Wow Platinum. Si, Wow.

El tono de fábula al que hace un momento hacía referencia hace que las interpretaciones y la puesta en escena sean artificiales e infantiles, o como sacadas de una obra de teatro. Escolar.
Véase el histrionismo extremo de Shia Labeuf, el perfil caricaturesco de Aubrey Plaza o escenas como la de John Voight y su "empalmada", que no sé como Coppola pudo atreverse a teclear en su máquina.

Más de 40 años, decía. Yo creo que en estos 40 años Coppola realmente ha tenido una obra maestra entre manos, y que si la hubiese hecho en su Prime hubiese sumado otra obra maestra a las cuatro o cinco que dio a luz en los años 70. Pero en cuatro décadas a la fuerza ha tenido que diluírsele en su mente de tal manera que ha acabado por convertirse en un espectáculo grotesco, y en una película ininteligible, contrahecha y fallida. Si hubiese tenido Apocalypse Now en mente durante 40 años difícilmente habría salido lo que salió en el 79, y hoy sería muy diferente. Imaginaos todas esas ideas mutando y cambiando, toda esa ambición diluyéndose y marchitándose durante décadas.
Simplemente no podía salir bien. Y menos cuando Coppola lleva al menos veinte años sin dar una al derechas.

Por donde más se puede salvar la película es en la parte estética, que aunque es hortera, y haya que aguantar algunas escenas psicodélicas, largas e irritantes, a las que no encuentro objeto ninguno, tiene momentos de gran belleza y potencia conceptual como la de las estatuas en movimiento, o las sombras en los edificios cuando se estrella el satélite. Ideas que dejan imágenes para el recuerdo, como ese par de fetos que se transforman en una transición sorprendente en dos niños esculpidos en piedra, aunque no me hagáis explicaros porqué en la película aparece una secuencia así.

Tiene algunos momentos donde el drama vira hacia el thrller político donde la trama se vuelve más interesante, y deja algunas ideas acertadas, aunque difíciles de descifrar como la habilidad del protagonista (un Adam Driver que logra dar cuerpo a lo inclasificable) de detener el tiempo, o la idea de la Megalopolis en sí, aunque ese concepto del....¿megalio? ¿megalon?, bueno, el material científico/mágico con el que se pretende dar forma al futuro de la ciudad, y de la humanidad, es infantil a más no poder.

Lo que más me emputa es que llevo días sin parar de pensar en ella, así que ALGO tiene que tener.  Pero no sé muy bien dónde.

Un 4.5

Rincón de apreciación de la diosa Nathalie Emmanuel





Y de la no menos diosa Aubrey Plaza, que recordad que en la película se llama.....

[hunk39]

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Solo entro para comentar WOW!!! XD

[gunzalobill]

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Uff que ganas

De no verla

[Sabandija asquerosa]

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Yo ya cometí la imprudencia de ver Tetro y Twixk (o como se llame). Puedes engañarme una vez, Coppola, puedes engañarme dos veces, pero, virgen santa, tres veces ni de coña.

(Todo el mundo sabe que acabaré viéndola cuando acabe en alguna plataforma)

[Sabandija asquerosa]

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Sergio del Molino (personaje tan ahostiable como interesante, a mi parecer) ha dejado sus primeras impresiones sobre la peli en Facebook. Os rescato el final, que me ha hecho gracia:

“ El subtítulo dice que es una fábula. Si lo es, la moraleja debe de tener que ver con jubilarse a tiempo.

La trama parece un anuncio de Marina d'Or Ciudad de Vacaciones.

La estética es un aborto retrofuturista digno de un anuncio de Paco Rabanne.

El discurso intelectual parece escrito a medias por Coelho y el psicólogo de guardia de El País Semanal.

El discurso político es digno de un hilo de tuiter.

Joder, qué sufrimiento, de verdad. Es que no me puedo creer lo que he visto”.

[Raziel Monsalud]

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Solo que muy pocos la van a saber apreciar. Porque es confusa, es aburrida no, aburridísima, la trama es naif en su pretensión de funcionar como "fábula" (así se define la propia película), y la gran parte de los actores están desastrosos, recitando líneas de diálogos bochornosas a las que cuesta seguir el hilo. No porque yo sea tonto y no las entienda, sino porque salen de la boca de sus intérpretes sin ton ni son. ¿Os acordáis de la célebre línea de 'The Room', "anyway, how is your sex life?" Pues así.

Joder, vaya panorama   . Aunque esta semana la tenía (y la tengo) petada por tema laboral tenía pensado verla en plan kamikaze, pero, después de leer esto espero a ver si aguanta a la próxima. Si la veo bien, y si no, también.

Gracias por la reseña   .

[Al Ejandro]

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Veo que al final se debería haber llamado.. Megapopolis...

Ya me voy...

[Marveler]

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Lo que más me emputa es que llevo días sin parar de pensar en ella, así que ALGO tiene que tener.  Pero no sé muy bien dónde.

Acabo de leer la crítica que ha hecho Warren Ellis en su newsletter y he sonreído cuando una de las cosas que menciona es exactamente esto.

Luego añade que quiere verla al menos 2 o 3 veces más, pero ya de las tendencias masoquistas del personal no voy a opinar. A mi en el fondo me da pena no haberla pillado en el cine y sé que la acabaré viendo en digital, pero no creo que vaya a compartir el entusiasmo de este buen señor.