24-02-2020, 12:06 PM
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A principios de los 80 un crítico literario estipulaba que el terror y la ciencia ficción no eran géneros que casasen demasiado bien. Helo aquí que Martin apareció en escena y dijo que de eso nanai, y se dispuso a replicar al crítico de marras con una historia propia que mezclase hábilmente elementos muy característicos de ambos géneros. De todo ello nació esta "Nightflyers".
"Nightflyers" se enmarca en el universo de ciencia ficción que Martin creó hace ya décadas y del cual forman parte obras como "Muerte de la luz", "Refugio del viento" y "Los viajes de Tuf". En la que nos ocupa, un grupo de científicos se embarcan en La Nómada nocturno para dirigirse a los confines de la galaxia y poder estudiar a los Volcryn, una suerte de raza alienígena de la que se conoce entre poco y nada.
Si analizamos un poquito ya vemos aquí dos elementos muy característicos que se pueden extrapolar tanto a la ciencia ficción como al terror. La nave se conforma como un personaje más y hace las veces de casa encantada, los personajes van cayendo uno a uno (creo que no es ningún spoiler no?) y no faltarán escenas cargadas de suspense y algo de mal rollo, pero sin pasarnos. En el terreno de la ciencia ficción la propia naturaleza de la expedición y todo el contexto de género nos dan las señas de identidad propias de la ciencia ficción ligera.
Digo ligera porque "Nightflyers" es una novela corta de 200 páginas que se lee en dos suspiros y que no tiene otra pretensión más que la sana diversión. Y ya. No esperéis disgresiones filosóficas ni reflexiones profundas. Martin no está a eso. Y teniendo en cuenta que sus novelas suelen ser bastante densas creo que es algo que se agradece. Sin embargo, por el camino nos quedan algunos personajes algo pobretones, cosa rara hablando de quien hablamos, pero siendo una novela tan corta al final creo que es un aspecto que, en ocasiones, se nos queda algo corto (salvo algunas excepciones notorias, nos la pela un poquito quien se muera y quien no). Juega en su contra así el hecho de ser una novela corta y tener un número bastante generoso de personajes a las que atender y dar señas de identidad. El hecho de que Martin les de nombres algo extravagantes no ayuda y nos puede ocurrir que, o bien confundamos alguno con otro, o simplemente no prestemos demasiada atención a algunos de ellos. No obstante, Martin se guarda algún as en la manga, y es que hacia el final hay un pasaje en concreto en el que el sentido de la maravilla se adueña por entero de la narración y Martin nos transmite de una forma muy vívida lo que sienten y ven los personajes, deseando explorar algún día las estrellas en busca de fenómenos extraño y/o extraordinarios. Sin duda mi pasaje favorito.
Por el camino se sucederán muertes, habrá misterios que resolver y aventuras en el espacio profundo. Personalmente no me parece la mejor novela de Martin (ni de lejos), pero teniendo en cuenta la agilidad de la narrativa y su ligereza y extensión me parece una buena opción, en especial si queremos completar la bibliografía de este señor (como es mi caso), o si simplemente buscamos un entretenimiento pasajero y divertido. En este sentido la novela se lee con interés y nos sorprenderemos en las sesiones que le dediquemos lo rápido que pasan las páginas (casi sin darme cuenta llegué a la mitad).
Un apunte personal, si me permitís. Adoro "Canción de Hielo y Fuego". Incluso si al final a este señor no le da tiempo a terminarla, no tendré otra cosa que palabras de agradecimiento por las horas que me ha dado de buena literatura (no pretendo abrir ningún debate sobre el ritmo de escritura de Martin, por cierto). Sin embargo, leyendo las otras novelas que conforman su bibliografía, en ocasiones siento una punzada de tristeza al ver cómo un escritor al que adoro se ha hipotecado en un universo de fantasía del que lleva sin salir más de 20 años. En mi fuero interno deseo en ocasiones que hubiera seguido publicando novelas independientes y autoconclusivas. Creo que habríamos disfrutado de más libros salidos de su pluma.
Pero bueno. É lo que hay!
¡Estúpido hombre sabio!
